El Comité Internacional contra la Impunidad en Venezuela (Ciciven) rechazó la reapertura parcial de la frontera colombo-venezolana, porque, argumenta, no se está garantizando el libre tránsito de personas y bienes entre ambos países, lo que viola lo establecido en la Constitución de las Repúblicas de Venezuela y Colombia, y la Convención Americana de Derechos Humanos.
La organización exige la reapertura total de la frontera por vía aérea, terrestre, fluvial y lacustre, sin más limitaciones que las que impliquen la seguridad de ambos Estados.
Así mismo, el Comité exhorta a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA, a abrir una investigación sobre la vulneración del derecho de libre tránsito a los habitantes de la frontera colombo-venezolana, que afecta de manera directa e indirecta a más de 80 millones de colombianos y venezolanos “que, por razones históricas, de consanguinidad, económicas, políticas y sociales, necesitan un libre tránsito entre ambas naciones”.
“Civiven aspira que los pueblos de Venezuela y Colombia, herederos de la doctrina de El Libertador Simón Bolívar sobre la creación de la Gran Colombia, decretada en Angostura en 1819 y ratificada en La Villa del Rosario de Cúcuta, en 1821, puedan ejercer libremente, como ha sido tradicional, el paso entre ambos países, la reapertura total de la frontera colombo-venezolana, con respeto absoluto a los derechos humanos y a las garantías constitucionales”, sentencia el comunicado.
Comunicado completo
El Comité Internacional Contra la Impunidad en Venezuela, CICIVEN, considerando que el 19 de agosto de 2015 el gobierno venezolano de Nicolás Maduro ordenó un cierre unilateral de la frontera con Colombia, el cual vino acompañado de deportaciones y desplazamientos forzosos, así como de la destrucción de viviendas de colombianos residentes en San Antonio del Táchira;
CONSIDERANDO
Que el 23 de febrero de 2019, cuando los sectores democráticos venezolanos intentaron ingresar ayuda humanitaria a Venezuela desde Cúcuta, el gobierno de facto de Nicolás Maduro rompió relaciones diplomáticas y consulares con el vecino país de Colombia;
CONSIDERANDO
Que durante el cierre de fronteras se han cometidos violaciones de derechos humanos y crímenes de lesa humanidad, que CICIVEN y otras organizaciones de la sociedad civil venezolana, así como defensores de derechos fundamentales han denunciado en distintas oportunidades y escenarios;
CONSIDERANDO
Que tomando en cuenta que el pasado 26 de septiembre el gobierno de Colombia y el usurpado gobierno de Venezuela, con la presencia del presidente Gustavo Petro en el Puente Internacional Simón Bolívar, anunciaron la reapertura de la frontera, acto seguido con el paso de gandolas con mercancía, entre ambos países;
CONSIDERANDO
Que la anunciada reapertura de fronteras solamente se limitó al mencionado intercambio de gandolas con mercancía, continuando limitado a paso peatonal, el movimiento de personas entre ambos países, lo cual sigue representando una violación de derechos humanos y crimen de lesa humanidad.
ACUERDA
Primero: Rechazar la reapertura parcial de la frontera, porque ella continúa violando los artículos 50 de la Constitución de la República de Venezuela, 24 de la Constitución Política de Colombia, así como el 22 de la Convención Americana de Derechos Humanos, que garantiza el libre tránsito de personas y de bienes.
Segundo: Exigir la reapertura total de la frontera por vía aérea, terrestre, fluvial y lacustre, sin más limitaciones que las que impliquen la seguridad de ambos Estados.
Tercero: Exhortar a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA, a abrir una investigación sobre la vulneración del derecho de libre tránsito a los habitantes de la frontera colombo-venezolana, que afecta de manera directa e indirecta a más de 80 millones de colombianos y venezolanos que, por razones históricas, de consanguinidad, económicas, políticas y sociales necesitan un libre tránsito entre ambas naciones, hechos estos que han venido acentuándose en los últimos años.
Ciciven aspira que los pueblos de Venezuela y Colombia, herederos de la doctrina de El Libertador Simón Bolívar sobre la creación de la Gran Colombia, decretada en Angostura en 1819 y ratificada en La Villa del Rosario de Cúcuta, en 1821, puedan ejercer libremente, como ha sido tradicional, el paso entre ambos países, la reapertura total de la frontera colombovenezolana, con respeto absoluto a los derechos humanos y a las garantías constitucionales.
En Miami, Estados Unidos, el cuatro de octubre de dos mil veintidós.