Por Frontera Viva

Como “la más absoluta hipocresía” califica el abogado y articulista Humberto González Briceño, la actitud “doble cara” del gobierno de Estados Unidos (EE. UU) en relación a Venezuela.

A propósito de la 9na edición de la Cumbre de las Américas, a la que Venezuela no fue invitada, conversamos con González Briceño, quien nos ofreció una lectura del contexto actual de las relaciones bilaterales entre los países de América Latina y los países del norte, especialmente Estados Unidos.

Desde 1994, la potencia norteamericana celebra un encuentro con algunos de los países miembros de la Otan para discutir alianzas que fortalezcan a la región, al menos así es en papel, pues estos eventos se han probado infructuosos en el pasado, de acuerdo con el abogado. Esto último, debido a que “EE. UU ha mantenido los últimos 50 años una geopolítica enfocada en Medio Oriente y Europa”, generando una política exterior de “abandono” y “desgano” hacía Sur y Centro América lo que ha hecho que el encuentro pierda trascendencia pudiendo esta ser la última convocatoria de este estilo, afirmó Gonzáles Briceño.

A pesar de que el gobierno del presidente Joe Biden aseguró que excluía a Venezuela de los invitados a la cita alegando “reservas sobre la falta de espacio democrático y la situación de los Derechos Humanos” recientemente se dio a conocer la reactivación de los trabajos de empresas petroleras en Venezuela como resultado de la flexibilización de algunas sanciones lo que, a juicio de González, se convierte en una “medida para auxiliar el régimen de manera económica” revelando ambivalencia en el gobierno norteamericano.

En conversaciones con Frontera Viva, González aseguró que “Biden no sabe qué hacer con el chavismo”, sin embargo, la exclusión de Venezuela del evento envío otro mensaje importante: “Guaidó no es gobierno existente” es “metafóricamente reconocido”, pero Estados Unidos continúa “bailando al son del chavismo”.

Le puede interesar.  Políticamente desenfocados

Un imperio debilitado

Para el abogado venezolano la ausencia de varios mandatarios en esta Cumbre de las Américas también reveló que el evento carece de trascendencia y que EE. UU ha perdido su credibilidad.

El experto advirtió que en años anteriores el rechazo de la invitación habría sido impensable por temor a consecuencias ulteriores, por lo que la ausencia de varios mandatarios indica una pérdida de influencia, sobre todo cuando la asistencia de países como Brasil y Argentina se aseguró con “incentivos”.

Esa disminución de liderazgo responde, según el articulista, a la fuerte presencia de China en América Latina, una presencia que fue consolidada por EE. UU al no interesarse más por sus países vecinos. Cada acuerdo con China fue una oportunidad perdida para el país norteamericano, advierte González.

Cambio explosivo

A la breve lectura que se hizo sobre la situación norteamericana le siguió una un poco más detallada sobre la política venezolana. En este sentido González es contundente en asegurar qué es erróneo el pensamiento de que un cambio de gobierno repercutirá en un cambio político. A su juicio, no habrá salida por las elecciones, pues no se trata de una crisis del gobierno, sino de Estado ya que, en 1999, a la llegada de Chávez al poder, este fabricó una constitución a su medida que continúa vigente hasta hoy.

De ahí que González hable de “reventar al Estado chavista” no a través de una transición por elecciones, sino a través de “un cambio violento” qué podría alcanzarse a mediano plazo si se llegarán a dar contradicciones dentro del sector militar, pues calificó a la oposición venezolana como “falsa” y “miope”.

Le puede interesar.  Senado de EEUU aprueba por unanimidad la ley Bolívar para impedir negocios con régimen de Maduro

La falta de participación electoral y de interés por los partidos políticos actuales son para el especialista un “elemento de esperanza”, dado que constituye un espacio no organizado desde el cual replantearse la estructura del gobierno venezolano y así reformarlo. Su propuesta pasa por que sean los ciudadanos los que tomen las decisiones y no los partidos políticos.

Sostiene que estos venezolanos que se abstienen de votar constituyen la “reserva moral” del país, ya que no están interesados en la “política corrupta que trafica con las ilusiones”. González apunta a un sistema político donde los ciudadanos organizados escojan a sus representantes, que a la vez podrían, posteriormente, organizarse en partidos. Aboga por una República donde el ejercicio democrático sea diferente a través de lecciones en segundo o tercer grado.

Para materializar su propuesta, el abogado venezolano asegura que el papel principal descansa sobre los hombros de los venezolanos que continúan en Venezuela y que el papel de los venezolanos en el exterior pasa por ayudar al “proceso de pensar una Venezuela distinta”. “Desde las entrañas se recupera”, sentenció.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí