Aunque la percepción de inseguridad en Perú está siendo asociada con la llegada masiva de venezolanos, la Fiscalía precisó que la problemática se debe al deterioro de las condiciones de vida y no tiene relación con la presencia de migrantes y refugiados de otros países.
“La percepción de inseguridad aumenta por las condiciones de vida en los vecindarios y no necesariamente por la presencia de refugiados y migrantes venezolanos”, concluye un informe de la Fiscalía junto a la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
El 0,6 % de las denuncias por delitos en 2019 y 2020 en Lima fueron contra venezolanos, lo que representa un porcentaje mínimo del registro policial. Sin embargo, el 28% de los peruanos tiene una percepción negativa de ellos y el 39% los asocia a hechos delictivos.
El informe de la Fiscalía y OIM también sentencia que los medios de comunicación peruanos, tanto nacionales como locales, tienen incidencia en “la creación del imaginario de aumento de percepción de inseguridad” por la inmigración venezolana.
Esta estigmatización contra los ciudadanos venezolanas fue usada en la campaña electoral del año 2021, cuando varios candidatos prometieron deportaciones masivas.
“Esta percepción de inseguridad no es nueva y tampoco es fruto de la migración venezolana. Hay elementos que aumentan la percepción de inseguridad, como la calidad de los servicios públicos y el deterioro de los espacios comunes”.
Prensa Frontera Viva